En nuestra consulta se realizan estudios de la marcha baropodométricos donde se registra el apoyo de cada miembro en la amortiguación, la estabilidad y la propulsión, así como sus posibles asimetrías.
La marcha es el modo de locomoción humana habitual donde se pone en juego todo el aparato locomotor.
Los estudios realizados y el desarrollo de métodos de investigación, han permitido analizarla e identificar las distintas fases de apoyo y las estructuras corporales que actúan de manera sinérgica y aportan a la marcha normal su adaptación y su cadencia.
El pie, cumple un papel importante en la relación entre el individuo y el medio ambiente porque está entre el cuerpo en movimiento y la superficie sobre la que apoya.
Está compuesta por articulaciones cuya acción mecánica se ve favorecida por la capacidad para deformarse, para amortiguar los golpes, adaptarse al relieve del terreno y ponerse rígido para transmitir las fuerzas reactivas. Actúa tanto como trasmisor de información gracias a los numerosos sensores podales como mecánico de amortiguación para favorecer la estabilidad y la trasmisión de las fuerzas en un contexto de locomoción de coste energético optimo.